El salmorejo cordobés es mi crema fría favorita de todo el mundo mundial. Nunca me parece que es suficiente y en verano no falta en la nevera.
La he acompañado de las más variadas cosas, cebolla frita, langostinos, encurtidos.
Pero hoy os traigo la receta con el acompañamiento más habitual y también mi preferido.
Ingredientes
1 kg
1/2 barra
1 diente
Tomate
Pan
Ajo
Sal
AOVE
Jamón Picado
Huevo cocido picado
Paso 1
Pelamos el ajo y lo partimos a la mitad y retiramos el germen, para que resulte más suave.
Paso 2
Lavamos los tomates, hoy hemos usado unos tomates pera, y los cortamos en cuartos.
Paso 3
Ponemos los tomates y el ajo en la batidora y lo trituramos bien.
Paso 4
Una vez triturado pasamos el puré resultante por el pasapurés con el filtro mas fino que tengamos. Así retiraremos las pieles y las semillas que hayan quedado
Paso 5
Volvemos a poner el puré de tomate en la batidora de vaso y añadimos el pan.
Ponemos a triturar hasta que se quede el pan completamente integrado en el puré.
Paso 6
Empezamos a añadir el AOVE a hilo para que vaya emulsionando y vemos como el salmorejo va cambiando de un color rosa a un color anaranjado.
Paso 7
La textura tiene que ser cremosa, y si queremos que quede más espeso necesitamos añadir más pan.
Metemos en la nevera, tiene que enfriar bien.
Paso 8
Picamos el huevo cocido y el jamón.
Paso final
Servimos muy frío y decoramos con el jamón y el huevo picado y con un poco de cebollino picado.
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