La historia, por mucho que nos quieran decir lo contrario, dice que esta salsa es de origen Menorquín y para mi es posiblemente la mayor contribución patria a la cocina mundial. Aunque su consumo es principalmente industrial, nada es comparable a una buena mahonesa casera.
Ingredientes
250 ml
1
2 cda
1
Aceite girasol u oliva
Huevo
Vinagre Jerez
Limón
Sal
Paso 1
Ponemos el aceite, el huevo y una pizca de sal en el vaso de la batidora.
Paso 2
Metemos el brazo de la batidora y sin moverlo, empezamos a batir.
En unos segundos veremos como se empieza a cuajar la mahonesa, a partir de ese momento ya podemos empezar a moverlo si es necesario.
Paso 3
En este punto añadimos el vinagre, los cítricos o una combinación de ambos.
Para una mahonesa de limón, usaríamos sólo zumo de limón y nada de vinagre.
Paso final
La guardamos en la nevera hasta que la usemos y nunca más de 24 hrs. después de hacerla.
Truquito. Si la mahonesa se os corta, no desesperéis. Añadís agua templada a cucharadas, y tras cada cucharada metéis batidora hasta que consigáis volver a cuajarla. Es química pura y dura.
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