La costilla de cerdo es una de de las preferidas en nuestro universo barbacoa. Pero hecha de esta manera la textura que adquiere esta carne la convierte en un manjar de dioses. La espera merece la pena.
Ingredientes
1
Costillar de cerdo
Especias
Sal ahumada
Pimienta
AOVE
Salsa BBQ
Paso 1
Secamos con papel de cocina las costillas y las adobamos con la sal, la pimienta y las especies que hayáis decidido.
Yo hoy he tirado de unas especias para carnes blancas de Spiceandteas que compramos en Chelsea Market en NY.
Las envasamos al vacío y las metemos en la nevera un mínimo de 4 horas.
Paso 2
Metemos las costillas en un baño de agua a 65º durante 30 horas.
Paso 3
Una vez hechas, si no las vas a consumir en el acto, hay que enfriarlas en un bol con agua y hielo durante 1 hora.
Esto es indispensable para tratar de que no pase más tiempo del estrictamente necesario en rangos de temperaturas donde proliferan las bacterias que pueden dar al traste con nuestra preparación.
Una vez pasado ese tiempo las metemos en la nevera hasta 5 días o al congelador.
Paso 4
A la hora de prepararlas, debemos recuperar la temperatura con un baño a 60º durante 1 hora más o menos.
Paso 5
Una vez recuperadas, en una sartén ponemos los jugos de la cocción de las costillas con 1 taza de salsa BBQ de calidad.
Paso 6
Ponemos a calentar el horno a 200º.
Embadurnamos las costillas con la salsa BBQ que hemos preparado y las ponemos en una bandeja de horno antiadherente.
Paso 7
Metemos las costillas en el horno con la carne hacia arriba durante 15 minutos.
Paso final
Servimos recién sacadas del horno, cortadas de una en una o el trozo de costillar completo, eso ya depende de gustos y del hambre de cada uno.
En casa cuando las preparo, medio costillar para cada uno y que no te lo toque nadie.
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