Los cogollos de Tudela son una de esas verduras con un toque viejuno, que antes se veían en multitud de cartas y ahora están desaparecidas.
Este año me he liado y he plantado una docena en la huerta y vaya sorpresa, os dejo esta que es la primera de las recetas que he tuneado un poco de lo que encontramos publicado. Nos han rechiflado.
Ingredientes
2
1
1 lata
2
Cogollo de Tudela
Tomate
Anchoas
Burratinas
AOVE
Vinagre
Mostaza
Nueces
Paso 1
En nuestro caso, como son cogidos a mano, Quitamos las hojas exteriores de los cogollos y los partimos a lo Iago en 4 partes.
Paso 2
Ponemos las nueces en un mortero y las machacamos.
Paso 3
Ponemos en un recipiente hermético el AOVE, el vinagre, una cdta de mostaza, las nueces y 1/2 cdta de sal.
Paso 4
En una sartén ponemos un chorrito de AOVE y ponemos a la plancha los cogollos, por los dos lados planos, el exterior lo dejamos sin pasar para que se quede crujiente.
Los dejamos que se doren y los retiramos de la sartén.
Paso 5
En una fuente colocamos el tomate pelado y en mitades o en rodajas, eso dependerá del tamaño del tomate y vamos colocando encima los cogollos según los sacamos de la sartén.
Paso 6
Sobre cada cogollo colocamos una anchoa, por favor conseguir una anchoas de una buena calidad, que son esenciales para triunfar.
Paso 7
Partimos las burratinas y las colocamos en la bandeja y lo aliñamos todo con la vinagreta de nueces que habíamos preparado.
Yo hoya mayores a la vinagreta le añadí un poco de miel licuada y lo que sobro del tomate bien picadillo.
Paso final
Servir inmediatamente para que todavía estén los cogollos templados.
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